Imagen: Dinero.com
Por ANDI*
Colombia
terminó el 2016 con un bajo crecimiento, apenas bordeando el 2%, pero logramos
crecer en un contexto de contracción en América Latina; la industria se
recuperó; mantuvimos una tasa de desempleo de un dígito; los indicadores
sociales avanzaron; la deuda externa se mantuvo estable y, logramos estabilizar
el entorno macroeconómico, en una coyuntura de volatilidad en los mercados y
fuertes presiones inflacionarias. En este entorno la manufactura tuvo un
relativo buen desempeño.